Pese a que la Sociedad dirigida por Juan Roig no es una sociedad cotizada, lo cierto es que sí que es una sociedad de interés público y como tal sus resultados atraen la atención de múltiples medios.

En este sentido, Mercadona ha hecho público sus datos de Marzo y, sorprendentemente pese a aumentar las ventas un 14 % hasta los 2.331 millones de euros, redujo sus beneficios un 95 % respecto al mismo mes del año pasado hasta los 5 millones de euros.

Las principales razones serían el aumento de un 25% en sus costes, mayoritariamente relacionados con el COVID19, entre los que se incluye la gratificación extraordinaria que ha dado a sus trabajadores, la compra de equipos de protección y en desinfecciones de tiendas y centros logísticos.

Como cualquier mercantil, Mercadona se debe en última instancia a sus accionistas, pero en estos tiempos, la sociedad valenciana está demostrando estar a la altura frente a todos los grupos de interés.

Adicionalmente, este ejemplo nos debe ayudar a los accionistas a ser más críticos con la situación y no pensar que el incremento de las ventas de las cotizadas en estos tiempos se tiene que materializar necesariamente en mayores beneficios, aunque en algunos caso sea así como parece ser en las farmacéuticas (como por ejemplo Grifols), en bienes de consumo (por ejemplo Deoleo) o se espera que sea en DIA.